Lendi: una app para compartir cosas
Lendi es una aplicación móvil para compartir objetos. La idea es simple: si necesitas algo, en vez de comprarlo, puedes pedirlo en Lendi, y un vecino te lo puede prestar gratis.
Es una idea simple, pero muy poderosa. Especialmente si consideramos lo poco que usamos una escalera, una máquina de coser o un taladro (el ejemplo más típico). Estos objetos nos cuestan dinero y pasan la mayor parte de sus vidas en un armario o un trastero. Con Lendi, podemos ahorrar dinero y tomar prestadas esas cosas. Además, nos ayuda a conocer a gente nueva en el vecindario.
Lendi: sostenibilidad
Pero no es solo eso. Cada vez que compramos algo que no necesitamos, como un taladro, no solo se desperdicia dinero: el taladro en sí mismo en algún momento se convertirá en residuo. El envoltorio de plástico es un residuo. El embalaje y el manual de instrucciones son residuos. ¿Vino en una bolsa de plástico? También es residuo. Residuos que pueden llevar a la Tierra cientos o miles de años “digerir”.
Pero aún hay más. También están los residuos que no vemos. Los diferentes componentes dentro del taladro seguramente provienen de diferentes sitios, y el taladro mismo puede provenir del otro lado del mundo. Toda esta distribución se hizo casi seguro usando medios de transporte impulsados con energías no renovables, por lo que contaminaron a la atmósfera con gases de efecto invernadero.
Pero ahí no acaba la cosa. La producción de esos componentes y el montaje del taladro habrán requerido una buena cantidad de agua y otros recursos, pueden haber generado más deshechos y, de nuevo, haber sido alimentados por energías no renovables.
Y podríamos profundizar más aún y pensar en las otras muchas consecuencias que tiene comprar algo. ¿Se ha tratado adecuadamente a todos los trabajadores involucrados en la fabricación y venta del producto? ¿Los componentes se han obtenido por medio de un comercio justo? ¿Ha sido testado ese producto en animales? (Bueno, en el caso del taladro, ¡espero que no haya que plantearse esto último!)
En resumen, el verdadero coste de comprar un taladro, que usaremos solo unas pocas veces a lo largo de su vida útil, es mucho más alto de lo que pagamos en la tienda. Compartir con los vecinos no es solo una manera de ahorrar dinero y conocer gente nueva: es un ingrediente fundamental de una sociedad sostenible.
Lendi: el salto
He colaborado con Lendi en alguna ocasión como científico de datos, y he editado su último vídeo. Hace unos meses, iniciaron un crowdfunding y prometieron (¿supongo que inicialmente en broma?) que harían puenting si alcanzaban su objetivo. Pues bueno, sí que lo alcanzaron, y … el resto de la historia está en el video: