¿Estás pensando en dejar el mundo académico para conseguir un trabajo en la industria? ¿O simplemente te preguntas cómo es el otro lado? Dejar la investigación para convertirme en científico de datos es uno de los cambios más importantes de mi vida. Y no fue un movimiento fácil: estuvo plagado de inseguridad y riesgo. Pero algo que realmente me ayudó fue hablar con otros “académicos fracasados” que ya habían pasado por eso.

Ahora que soy uno de esos académicos fracasados, espero que este blog te pueda ayudar a ti en esa transición.

Antes de comenzar, ¿a qué me refiero con “el mundo académico” y  “la industria”? Son términos amplios y mis experiencias pueden ser muy diferentes a las tuyas. Así que te explicaré de dónde vengo. Solía trabajar como investigador en astrofísica. Después de un doctorado y tres postdoctorados decidí pasarme a la industria. Desde entonces he trabajado como científico de datos, primero en una gran consultora de banca, y luego en el sector de energías renovables. Además, he colaborado como científico de datos con startups tecnológicas y ONGs en diversos campos (para leer más sobre mí, puede visitar mi página personal).

Si bien es cierto que echo de menos algunos aspectos de la investigación, no me arrepiento de haber dejado el mundo académico. La ciencia de datos está en auge y hay mucho trabajo interesante para hacer de este mundo un lugar mejor. Sin embargo, pasarse a la industria suele ser una carretera de sentido único. Por tanto tienes que estar seguro de tomar la decisión correcta.

Así que, tanto si estás considerando dejar el mundo académico, como si simplemente tienes curiosidad por la alternativa industrial, espero que este blog te resulte útil. Y si tienes alguna pregunta o sugerencia, o quieres compartir tu propia experiencia, ¡no dudes en contactar conmigo!